Con el paso del tiempo se hizo necesariosu traslado por tres razones principales:
- Los comerciantes ya no usaban el camino tradicional a los valles para comerciar con el Perú, por lo que la ciudad quedó cada vez más aislada.
- Los ataques de los indios Calchaquíes habían debilitado la resistencia de los vecinos.
- Las inundaciones de los ríos de la Quebrada destruían viviendas y cosechas .
- Aparecieron enfermedades mortales como el paludismo.
El gobernador de Tucumán, don Fernando de Mendoza y Mate de Luna, dispuso el traslado de la ciudad.
La nueva San Miguel de Tucumán fue llevada a un sitio conocido en esa época como LA TOMA, a las orillas del río Salí. El 27 de septiembre de 1685, el teniente Salas y Valdés plantó, en el nuevo lugar, el árbol de la justicia.
Hoy se recuerda ese traslado el 29 de septiembre de cada año.